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PORTFOLIO
Reforma en Robledo.
Intervención mínima en vivienda para optimizar los espacios comunes. Se trata de una vivienda amplia, con una estancia principal que disfruta de gran amplitud y vistas al jardín en su fachada sur. Sin embargo, el lado norte está excesivamente compartimentado, lo que deriva en unos espacios relativamente angostos y oscuros.
El punto de partida del encargo parte de un deseo de cualificar los espacios comunes, dotarlos de fluidez y actualizar la funcionalidad de los espacios compartimentados. El objetivo es que los espacios de uso habitual se conecten y participen de la amplitud, la luz y el paisaje.
Para ello, se decide transformar la compartimentación tradicional y articular los espacios compartidos a través del movimiento en planta de la tabiquería, y de aperturas verticales y horizontales en la misma, que permiten conectar visualmente los espacios, e introducen el paisaje y la luz hasta el núcleo de entrada, antes angosto y oscuro.
EL PROYECTO
La intervención gira entorno al núcleo de la vivienda:
Se conecta la cocina al salón recortando los tabiques como paneles fijos que no ocupan todo el plano: no llegan al techo y no hay puertas sino grandes aperturas.
Se transforma la habitación anexa a la entrada, con uso residual, buscando por un lado conectarla al espacio principal y por otro, dotar a la entrada de mayor amplitud. Esto se logra a través de un quiebro en la tabiquería y una mayor apertura dirigida al espacio principal.
El espacio del pasillo se dilata por el movimiento de los tabiques que lo acotan, y se conecta con el espacio principal y su luz a través de las aperturas de los mismos. De esta forma, el espacio se transforma en biblioteca, y funciona como nexo de unión entre los distintos espacios comunes desde la entrada.
Para la selección de acabados, mobiliario e iluminación, se optó por combinar acabados naturales y cálidos sobre fondo blanco, para mantener la luminosidad y equilibrar la intensidad de las texturas con la neutralidad del blanco.
Todos los espacios conectan en el plano del suelo con un pavimento de corcho que unifica y da continuidad. La cerámica en acabado arcilla mate se recorta en la pared blanca. Las luminarias en cerámica y madera hacen la réplica de acabados y mobiliario.
